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La aerotermia se ha convertido en una de las soluciones más eficientes y sostenibles para la climatización de numerosos hogares en la actualidad, especialmente durante los meses de mayor temperatura. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo funciona el sistema de aerotermia en verano?

En Inditer, como empresa especialista en brindar productos y servicios de climatización industrial, te ofrecemos este post, donde explicamos los principios que rigen la aerotermia y cómo aprovecha las temperaturas del aire exterior para mantener nuestros hogares frescos y confortables.

Desde su funcionamiento básico hasta sus ventajas en comparación con otros sistemas, descubrirás por qué la aerotermia es una opción ideal para el verano.

¿Qué es la aerotermia?

La aerotermia es una tecnología que utiliza la energía del aire para proporcionar calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria de manera eficiente y sostenible.

Este sistema se basa en el principio de las bombas de calor, que extraen calor del aire exterior y lo transfieren al interior de un edificio, o viceversa, dependiendo de la necesidad de calefacción o refrigeración. Por ello, la aerotermia es muy eficiente en el verano, ya que absorbe el calor del interior y lo expulsa al exterior.

Una de las características más destacadas de la aerotermia es su capacidad para aprovechar hasta un 75% de energía renovable del aire, utilizando solo un 25% de energía eléctrica para su funcionamiento.

Esto se traduce en un alto rendimiento energético, con coeficientes de rendimiento (COP) que pueden alcanzar valores de 4 a 6, lo que significa que por cada kilovatio hora (kWh) de electricidad consumido, se pueden generar entre 4 y 6 kWh de energía térmica.

Además, la aerotermia se considera una fuente de energía renovable, ya que contribuye a la descarbonización y a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, alineándose con los objetivos de sostenibilidad global.

Funcionamiento de la aerotermia en verano

Durante el verano el funcionamiento de la aerotermia se centra en el modo de refrigeración, donde el sistema extrae el calor del aire interior y lo libera al exterior, manteniendo así un ambiente fresco en el hogar.

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El proceso de la aerotermia en verano se basa en un ciclo termodinámico que utiliza un fluido refrigerante. Este ciclo comienza cuando el ventilador de la unidad exterior aspira el aire caliente del interior.

El refrigerante absorbe este calor y, al circular por un circuito cerrado, el compresor aumenta su presión y temperatura. Luego, el refrigerante se dirige hacia el intercambiador interior, donde se enfría y el aire es impulsado hacia las habitaciones.

Este proceso se repite de manera continua, creando un ciclo de extracción y expulsión de calor que permite mantener una temperatura agradable en el interior de tu hogar para proporcionar frescura y confort.

Ventajas de la aerotermia en verano

La aerotermia en verano ofrece diversos e importantes ventajas, como:

  • Eficiencia energética: Al igual que en invierno, la aerotermia resulta muy eficiente en verano, ya que aprovecha la energía del entorno para enfriar tu hogar, reduciendo considerablemente tu consumo eléctrico. La aerotermia consume menos electricidad en comparación con sistemas de aire acondicionado convencionales, lo que se traduce en una reducción significativa de la factura energética.
  • Confort térmico: Te proporciona un ambiente fresco y agradable durante los meses más cálidos del año. Este sistema opera de manera silenciosa, lo que es especialmente beneficioso durante la noche o en espacios donde se requiere un bajo nivel de ruido.
  • Versatilidad: La aerotermia puede utilizarse tanto para calefacción como para refrigeración, así como para la producción de agua caliente sanitaria, lo que la convierte en una solución integral para las necesidades de climatización y ACS de tu vivienda.
  • Respetuosa con el medio ambiente: Al ser una tecnología renovable, reduce tu huella de carbono, contribuyendo a un futuro más sostenible y ecológico.
  • Durabilidad: Los sistemas de aerotermia en verano tienen una larga vida útil.

Componentes principales de un sistema de aerotermia

Si estás pensando en adquirir aerotermos de climatización, te será útil saber que un sistema de aerotermia se compone principalmente de los siguientes elementos:

  1. Unidad exterior: Esta es la parte del sistema que se instala en el exterior de la vivienda. Contiene un ventilador que aspira el aire exterior, un evaporador donde se produce el intercambio de calor y un compresor que aumenta la presión del refrigerante.
  2. Unidad interior: Se ubica en el interior de la vivienda y generalmente se conecta al sistema de calefacción y/o refrigeración existente. Puede ser un fancoil, un radiador o un sistema de suelo radiante.
  3. Circuito de refrigerante: Es un circuito cerrado por el que circula un fluido refrigerante que absorbe el calor del aire exterior o del interior de la vivienda, según sea necesario.
  4. Depósito de acumulación: Este elemento es opcional, pero muy recomendable. Almacena el agua caliente sanitaria y permite optimizar el funcionamiento del sistema, especialmente cuando se utilizan energías renovables complementarias como la solar térmica.
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Tipos de Sistemas de Aerotermia

Como hemos dicho anteriormente, la aerotermia se basa en el uso de bombas de calor que aprovechan la energía térmica del aire exterior para proporcionar calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria.

Sin embargo, debes saber que existen varios tipos de sistemas de aerotermia, cada uno adaptado a diferentes necesidades y configuraciones de instalación.

1) Aerotermia Aire-Aire

Este sistema utiliza el aire exterior para calentar o enfriar el aire interior. Funciona mediante un compresor que extrae el calor del aire exterior y lo transfiere al aire interior a través de un intercambiador. Es común en instalaciones de climatización como los sistemas de splits y multisplits, así como en sistemas por conductos y sistemas de VRF (volumen de refrigerante variable).

2) Aerotermia Aire-Agua

En este tipo de sistema, la bomba de calor extrae calor del aire exterior y lo utiliza para calentar agua, que luego se puede usar para calefacción mediante radiadores o suelo radiante. Es un sistema que resulta muy eficiente y se considera una de las soluciones más populares para la climatización de interiores.

3) Aerotermia para Agua Caliente Sanitaria (ACS)

Este sistema está diseñado específicamente para calentar agua destinada al uso sanitario. Puede ser de dos tipos: compactas, que son adecuadas para pequeñas cantidades de agua caliente (hasta 250 litros), y partidas, que se componen de dos unidades separadas. Estas bombas de calor son ideales para hogares que requieren un suministro constante de agua caliente.

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Recomendaciones de Uso de un Sistema de Aerotermia

Para optimizar el rendimiento y la eficiencia de un sistema de aerotermia en verano o en otra época del año, es importante seguir algunas recomendaciones clave.

Aquí te presentamos algunas sugerencias para su uso adecuado:

1. Hacer un mantenimiento regular

Aunque los sistemas de aerotermia en verano requieren menos mantenimiento que las calderas de gas, es recomendable realizar una revisión anual, ya que esto asegura que el equipo funcione de manera eficiente y prolongue su vida útil. Durante esta revisión, se pueden identificar y corregir oportunamente posibles problemas antes de que se conviertan en fallos mayores.

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2. Uso de depósitos de inercia

Instalar depósitos de inercia puede ser muy beneficioso. Estos depósitos ayudan a reducir el número de ciclos de encendido y apagado del sistema, mejorando la modulación del Inverter y garantizando un volumen mínimo de agua en la instalación.

Este paso resulta especialmente útil durante el desescarche de la unidad exterior, ya que asegura que haya suficiente energía contenida en el fluido para llevar a cabo esta operación.

3. Control de temperatura

Es muy importante ajustar el termostato a temperaturas adecuadas, dependiendo de la época del año. Mantener una temperatura constante y moderada no solo mejora el confort, sino que también reduce el consumo energético. Por ello, es recomendable evitar cambios bruscos de temperatura, ya que puede ayudar a mantener la eficiencia del sistema.

De acuerdo a los especialistas, el uso de la aerotermia en verano debería contar con una temperatura recomendada entre 24 y 26°C de manera de disfrutar de un ambiente confortable en la vivienda.

4. Distribución del calor

Si utilizas sistemas de suelo radiante o fan coils, asegúrate de que estén bien distribuidos en toda la vivienda. Esto permite una mejor circulación del aire y una distribución uniforme del calor o frío, mejorando la eficiencia del sistema.

5. Aislamiento de la vivienda

Un buen aislamiento en paredes, techos y ventanas es crucial, ya que reduce las pérdidas de calor en invierno y el ingreso de calor en verano, lo que permite que el sistema de aerotermia funcione de manera más eficiente.

6. Uso eficiente del Agua Caliente Sanitaria (ACS)

Si tu sistema de aerotermia incluye también la función de producción de agua caliente sanitaria, es recomendable gestionar su uso para evitar que el sistema priorice el calentamiento del agua sobre la refrigeración. Debes saber que el uso de un acumulador de inercia puede ayudar a mantener el suministro de agua fría mientras se calienta el agua sanitaria.

Al seguir estas recomendaciones, podrás maximizar la eficiencia y el rendimiento de tu sistema de aerotermia en verano, asegurando un ambiente confortable y un consumo energético optimizado.

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